GOLPE DE ESTADO

Acabo de leer los periódicos. La noticia internacional importante es que el presidente hondureño Manuel Zelaya se encuentra en Costa Rica después de que un grupo de militares lo detuvieron y lo sacaron de su país. Zelaya, según se dice, había planeado hacer hoy domingo una consulta popular para saber si la gente deseaba su reelección (prohibida por la Constitución de Honduras).

Ayer escribía en este mismo espacio que me preocupaban las inclinaciones reeleccionistas y dictaroriales de algunos políticos latinoamericanos. Tales empeños son con frecuencia tentaciones dirigidas a mantenerse en el poder durante mucho tiempo mediante la manipulación de los grupos sociales más pobres.

Hugo Chávez (de Venezuela) , Evo Morales (de Bolivia) y Rafael Correa (de Ecuador) han usado las necesidades de los grupos sociales marginados para encumbrarse en la presidencia de sus respectivos países. Enseguida, han acudido a la manipulación de las masas y al sometimiento de las instituciones para tratar de establecer la justicia social que se necesita en Latinoamérica. No creo que el camino de la ilegalidad sea la forma de lograr una mejor distribución de la riqueza, pues una vez que las decisiones dependen de una sola persona se entra en una senda de tentaciones dictatoriales que coartan la libertad.